(1959)
Salmo de los 
pájaros negros
pájaros negros
Hierro somos                           somos tus negros pájaros de hierro 
repetimos tu silbo                                            repartimos tu nombre
por los campos Señor desplegamos de noche
tu Voz por los canchales la dejamos caer
sobre las torres de luz sobre las guarderías
sobre los ciervos que manan de los montes Señor
sobre las silenciosas plazas y los mercados pobres
de Jerusalén
por los campos Señor desplegamos de noche
tu Voz por los canchales la dejamos caer
sobre las torres de luz sobre las guarderías
sobre los ciervos que manan de los montes Señor
sobre las silenciosas plazas y los mercados pobres
de Jerusalén
                                    
    llegamos con el alba
ululan las sirenas de los claustros
se agitan las campanas los perros los escombros
los lirios se arrodillan Señor al paso de tus ángeles
ululan las sirenas de los claustros
se agitan las campanas los perros los escombros
los lirios se arrodillan Señor al paso de tus ángeles
lo hacemos en tu nombre
de mañana y de noche volamos y volamos
los ojos las escuelas y las puertas
volamos en tu nombre Señor los hospitales
de mañana y de noche volamos y volamos
los ojos las escuelas y las puertas
volamos en tu nombre Señor los hospitales
las piernas de Manhattan                    tronchamos sobre el Hudson
los ícaros ardientes de Manhattan cayendo sobre el Hudson
los ícaros ardientes de Manhattan cayendo sobre el Hudson
los taxis amarillos                 las bestias saludando en los cristales
y esas reses colgando de los puentes
de Sebrénika
tú júbilo Señor
tus crisantemos rojos
las risas que tú mismo cultivaste
bajo la fresca cúpula de tus santuarios...
oh Dios de Notre Dâme
oh Dios que riegas tu jardín en las basílicas
que tu testa
humedeces con el agua fresquísima  de las mezquitas
y el
dorado
aceite de las sinagogas      
¡levanta tu cabeza
escúchanos cantar escúchanos danzar
sobre las altas palmeras de Bagdad 
en la nochada!
somos tus negros pájaros de hierro
de mañana y de noche tu nombre repetimos
tu música dejamos Señor caer sobre los cuerpos
sobre la piel tendida de aquellos dos amantes
desnudos para siempre los amantes
tu música dejamos Señor caer sobre los cuerpos
sobre la piel tendida de aquellos dos amantes
desnudos para siempre los amantes
sobre una cama muerta      Señor     donde el
romero estalla
y viste el Musa Dagh de atardeceres rojos  
para que tú los cubras         Señor
              
bajo tus rosas
para que tú dibujes en su boca
las negras flores negras de tu burka
izamos las trompetas ondeamos los tambores
anillos de humo blanco como ayer
las negras flores negras de tu burka
izamos las trompetas ondeamos los tambores
anillos de humo blanco como ayer
escritos en el alba como ayer con un temblor  de seda
sobre las frías zanjas del invierno sobre las chimeneas
sobre las puertas oscuras de los trenes tocamos con los dedos
sobre las frías zanjas del invierno sobre las chimeneas
sobre las puertas oscuras de los trenes tocamos con los dedos
la música de Auschwitz 
las danzas hermosas de Treblinka
los dulces salmos negros        las hogueras    
¡Señor!
lo dicen los periódicos que envuelven la reseca comida 
(de los albañiles
      
lo dicen los pendientes de plata que una muchacha dejó   
 
perdidos en las suaves colinas de Polonia 
bajo las fauces negras de un cerezo en flor que crece 
(en la
estrechura 
cuando el reloj entreabre su túnica de de cedro
y la mujer se inclina buscando la sandalia de un muchacho
y la mujer se inclina buscando la sandalia de un muchacho
en una fosa común              
   oculta entre las flores Kosovo
                                                
Señor
                                     
bajo tus ángeles...
¡oh Padre           levanta la cabeza  
          desnúdate y respira
somos tus negros arcángeles de hierro
somos tus negros arcángeles de hierro
tu risa repartimos            Señor
                    danzamos
y danzamos
ahítos de tu
gloria           
cosidos a tu muerte                
   
Señor                
in nómine dei tu ira dibujamos  
y tu risa dejamos correr cuando atardece 
en la nuca del alba
Señor 
la lluvia bendita de tus rosas 
por los siglos de los siglos
Amen
De su libro
Salmo
Ed. El Toro de Barro, 2005.
De Salmo (2005):
«La danza del Burka» *  «Salmo de los pájaros negros» *  «La danza de los pásharos»
Enlaces a otros poemas dedicados a los atentados del 11 de marzo y el 11 de septiembre
La danza del Burka (Carlos Morales)
Fotografía del 11 de septiembre (Wislawa Szymborska)
Madrid, 11 de marzo (Manuel Rico)
Raíles en el cielo (Carmen Moreno)
Oración, (Paco Moral)
Salmo de los pájaros negros (Carlos
Morales)
Grandes Obras de
El Toro de Barro
|  | 
| Carlos Morales, "Coexistencia (Antología de poesía israelí –árabe y hebrea– contemporánea” Ed. El Toro de Barro, Carlos Morales ed. Tarancón de Cuenca, 2002. PVP 10 euros. | 
| El Toro de Barro | 
«La piel», de Bertolt Brecht * «Llevo tu corazón conmigo», Edward Estlin Cummings * «Canción para mi hijo», de Rabindranath Tagor  «Aforismos», de Frida Khalo
 

 
