Lo que entristece no es que el país está cambiando
que las heridas de las caleras se han desgarrado
ya que no existe cosa imposible de engañar con colores
sino que entre nosotros el aire se va agotando
y no podremos elevarnos a los montes.
Quedaremos parados en el confín del reservorio
de tierra de los antepasados
errando entre las encinas del llanto y las doradas
dunas
y una cabrita que nos dio su leche y su lana
con sus flacas patas nos allanó un camino en la
arena
hacia la sombra del algarrobo.
Y de no haber sido porque se obstinó
hacia dónde hubiéramos venido entonces
hacia dónde hubiéramos ido ahora.
Traducción de Oled Sverdlik
Estos poemas fueron publicados por la editorial El Toro de Barro en un volumen antológico que llevaba por título Coexistence, allá por el año 2002. En él, el poeta y estudioso español Carlos Morales recogió una breve selección literaria de poetas judíos y árabes de distintas religiones que tenían en común un claro compromiso con la reconciliación. (Ver Coexistence y Carlos Morales).
5 comentarios:Anónimo dijo:
Sólo hace falta ver poemas como éstos de Nathán Yonathán para darse cuente del autismo de la poesía española de hoy. Gracias a Carlos Morales y a Clara Janés, otra verdad nos sigue entrando como aire fresco por las ventanas que los poetas españoles han cerrado para beneficio suyo y para aburrimiento nuestro. Luis Santángel (19 de mayo de 2007 12:06)
Sólo hace falta ver poemas como éstos de Nathán Yonathán para darse cuente del autismo de la poesía española de hoy. Gracias a Carlos Morales y a Clara Janés, otra verdad nos sigue entrando como aire fresco por las ventanas que los poetas españoles han cerrado para beneficio suyo y para aburrimiento nuestro. Luis Santángel (19 de mayo de 2007 12:06)
Anónimo dijo: Nathan Yonathán fue uno de los grandes poetas de mi pais. Sus baladas se cantaban en las radios de los autobuses y los taxis. Su vida, como la de muchos judíos de su generación, fue una tragedia. Pero esas tragedias, que a otros les llevaron al rencor, a el lo condujeron al pacifismo. Quiero felicitarle por la inclusión de estos poemas en su blog, y también por su antología Coexistencia. Ud. hizo lo que parecía imposible. Y eso me parece una gran lección humana. Jeshua Goldberg. (19 de mayo de 2007 20:24)
LOLA GRACIA dijo: Gracias por tu visita, toro de barro. Intentaré pasarme con más detenimiento por tus poetas. Las mañanas siempre son agitadas para mí. Es un honor que te guste mi blog..,Espero que también mis versos :). No me atrevo a llamarlos poemas...(23 de mayo de 2007 9:42 )
LOLA GRACIA dijo: Si lo que amas son los ramos de espinas dolorosas,/ me iré al desierto y aprenderé a doler./Y si lo que has amado son los versos escritos en las rocas,/ pondré mirando el alma hacia las piedras/ y en los ariscos riscos la pondré a escribir./ Solamente entonces, cuando en su sombra/ la arena nos oculte y el libro de las cosas/ en lo oscuro se abra y nos proteja,/ acaso me digas palabras más hermosas/ que la felicidad y el llanto:/ parece que este hombre –dime-/ me dio todo su amor.Este poema me ha fascinado. (23 de mayo de 2007 9:49)
Siempre hay una piedra al final del camino esperando a los valientes...En realidad, lo único sensato que nos puede mover del sitio es tu propio sueño, es lo único cuya experiencia te puede permitir irte al otro con la sensación de que has hecho algo que nadie más podía hacer. Como este siempre, como este Nathán, que se pasó la vida trabajando por la reconciliación imposible. Lo dice Corredor Matheos: la bella obra inútil....
ResponderEliminarCecilia Domínguez Puerto